Desde que inicié mi carrera en la industria minera, siempre ha estado en mi mente el propósito de impulsar la inclusión femenina en este sector y contribuir así a la disminución de la histórica brecha de género. Si logramos tener una minería más diversa, tendremos una visión distinta sobre ciertos aspectos y eliminaremos los sesgos alrededor de la industria.
En cuanto a la aportación de las mujeres en el sector minero, es importante destacar que la diversidad de género trae consigo un sinfín de beneficios. Las mujeres han demostrado ser innovadoras y eficientes en la industria, aportando nuevas perspectivas y enfoques en la resolución de problemas. Además, se ha comprobado que las mujeres tienen una mayor preocupación por el cuidado de los equipos y la seguridad en el trabajo, lo que contribuye a disminuir los riesgos laborales y mejorar la productividad.
En este sentido, el rol de las mujeres en la industria minera no solo se limita a la inclusión, sino también a la generación de valor agregado y una mayor rentabilidad en las operaciones. Las mujeres han demostrado tener un alto nivel de compromiso y responsabilidad en el trabajo, lo que se traduce en un mejor desempeño y resultados óptimos para la empresa.
Es por eso que eventos como el XIV Encuentro Empresarial Iberoamericano y la llegada de Women In Mining a América Latina son grandes impulsos para lograr un trabajo en conjunto en la región que tenga como objetivo la disrupción de los estereotipos de género en la minería, los cuales limitan el crecimiento femenino en el sector.
Es importante resaltar que la principal razón por la que continúa la brecha en el sector se debe a los estereotipos de género de la cultura empresarial, los cuales mantienen la idea de que solo los hombres desarrollan las habilidades necesarias para aspectos como el liderazgo y el trabajo de campo. Sin embargo, muchas veces el problema real son las faltas de oportunidades de crecimiento.
Por eso es importante resaltar el compromiso de las empresas dominicanas por seguir generando oportunidades que impulsen el desarrollo de las mujeres, así como la creación de una cultura empresarial que se enfoque en la equidad de género, creando oportunidades igualitarias para el crecimiento laboral basadas en el trabajo y el esfuerzo, más no en el género o supuestos roles a seguir.
Actualmente, en el sector minero nos encontramos iniciando un nuevo capítulo a nivel empresarial e industrial que está rompiendo los esquemas de género y llevándonos a lograr un gran salto hacia un trato igualitario en la mina de Pueblo Viejo, impulsando el máximo potencial de todos nuestros colaboradores y colaboradoras, para así establecer modelos saludables a seguir para las nuevas generaciones.